imagen via art-or-porn
4 comentarios:
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Una vez por cada...
Si hay amor entonces hay suficientes...
Por supuesto que no planeo convertirme en el Marqués de Sade ni AN en Filosofía de Tocador pero aquí cabe acotar la diferencia espacio-temporal, ideo-pictórica. Me gusta pensar que tomarse de las manos al dar un paseo también es un fetiche. La acepción de Santurrón, digo, Saturno, es igual de valida que cualquier otra "más oscura".
Porque si el arte toca nuestras zonas erógenas, y la pornografía toca nuestras zonas erógenas... la diferencia... ya saben a qué se reduce.
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Cuando no pienso
cuando no pienso igual que ayer
Si así le seguimos, es decir, identificando la erogenicidad en nuestras experiencias estéticas y sexuales, podríamos empezar a identificar las zonas erógenas del pensamiento. ¿Quién dice que la filosofía misma no es un tipo de fetichismo? ¿Hay diferencia entre fantasear con estar en una disposición física excitante y fantasear con estar en una posición existencial con sentido? ¡Quiero que la existencia tenga una razón de ser!
Too bad it was love at First sight
the Second I saw you
for me to Third that emotion.